El regulador de los mercados de EE.UU. prosigue el deshielo en su relación con los criptoactivos tras la llegada Trump a la Casa Blanca
MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
La plataforma de intercambio de criptoactivos Coinbase ha anunciado este viernes que la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC) retirará la demanda planteada en 2023 contra la firma, a la que acusaba de operar de manera ilegal, lo que supone un nuevo paso hacia la reversión de las políticas contrarias a las criptos lideradas por el anterior presidenta del regulador, Gary Gensler.
"El personal de la SEC acordó en principio desestimar su caso de ejecución ilegal contra Coinbase, sujeto a la aprobación del Comisionado, corrigiendo así un error importante", ha anunciado Paul Grewal, representante legal de la plataforma cripto.
Coinbase recuerda que salió a bolsa en abril de 2021 y, como parte del proceso para cotizar, la SEC revisó su modelo de negocio y autorizó su salto al parqué, aunque dos años después demandó a la plataforma, a pesar de que no había habido ningún cambio en dicho modelo de negocio.
"Lo que cambió durante esos dos años fue el liderazgo político de la SEC", ha subrayado Grewal, para quien el regulador "en su guerra contra las criptomonedas actuó como si estuviera por encima de la ley".
En su demanda de junio de 2023, presentada en el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, la CNMV estadounidense acusaba a la plataforma de intercambio de criptoactivos de operar como bolsa de valores, corredor y agencia de compensación nacional no registrada, además de no haber registrado su servicio de criptoactivos.
Un día antes de registrar su denuncia contra Coinbase, la SEC denunció a la plataforma Binance, sus empresas afiliadas y contra su consejero delegado, Zhao Changpeng, a los que acusó de infringir las leyes de valores estadounidenses y operar sin el registro correspondiente.
La semana pasada, Binance y la SEC pidieron solicitaron la paralización por 60 días de la demanda que el regulador había interpuesto al considerar que el nuevo grupo de trabajo de la SEC sobre criptoactivos podría promover un desenlace al caso sin necesidad de intervención judicial.
De su lado, Grewal ha asegurado que el anuncio de este viernes confirma que este caso nunca debería haberse presentado en primer lugar. "Esta es una victoria no sólo para Coinbase, sino para nuestros clientes, los Estados Unidos y la libertad individual", ha afirmado.
En este sentido, para garantizar que la innovación continúe en Estados Unidos y que "un regulador deshonesto" no pueda volver a utilizar la falta de claridad como arma, Coinbase considera fundamental aprobar una legislación que proporcione la certeza a largo plazo necesaria para que Estados Unidos lidere esta industria.
"Creemos que eventualmente llegaremos a un punto donde la mayor parte del PIB mundial fluya sobre raíles criptográficos. La pregunta clave es si Estados Unidos aprovechará la oportunidad de construir esta infraestructura o se quedará atrás", ha añadido el representante de Coinbase.
En este sentido, la plataforma ha expresado su deseo de trabajar con el personal de la SEC, que está preparado para implementar un cambio real.
Por otro lado, la SEC anunció ayer la creación de una división encargada de combatir el fraude cibernético y proteger a los inversores minoristas, llamada Unidad de Tecnologías Cibernéticas y Emergentes (CETU), que sustituirá a la Unidad Cibernética y de Criptoactivos.
Así, este equipo ya no se centrará solo en perseguir estafas con criptoactivos, sino que también tendrá competencias para luchar contra conductas delictivas que empleen inteligencia artificial (IA) y 'machine learning', que se publiciten en redes sociales y la red oscura o que accedan a información privada a través del 'hacking', entre otros.
Esta redefinición se traduce en la práctica en una 'desdemonización' de los criptoactivos que contrasta con el celo regulador del anterior presidente de la SEC, Gary Gensler, de sensibilidades demócratas y partidario de poner coto a este tipo de instrumentos financieros digitales.
La nueva brigada seguirá estando capitaneada por Laura D'Allaird, aunque estará compuesta por 30 especialistas en fraude y abogados, 20 miembros menos que antes.