MÉXICO DF, 11 Oct. (Notimérica/EP) -
El estado de Guerrero es uno de los más peligroso de México, según los datos que ha facilitado el Sistema Nacional de Seguridad Pública, que señala que es allí donde se produce la mayor tasa de asesinatos de todo el país, con 29 homicidios premeditados por cada 1.000 habitantes.
Precisamente fue allí donde se produjo el pasado 26 de septiembre la matanza de Iguala, en la que 6 estudiantes de magisterio fueron asesinados y 43 permanecen desaparecidos. La opinión pública se percataba entonces del grado de inseguridad que existe en este estado del sur de México, que también cuenta con una de las mayores tasas de secuestros, robos y violaciones sexuales.
De enero a agosto de 2014 se produjeron en Guerrero 1.029 asesinatos --la mitad de ellos con armas de fuego--, 11 casos de extorsión y 81 secuestros, situándose por tercer año consecutivo en el primer puesto en número de homicidios premeditados.
Con cerca de cuatro millones de habitantes, es uno de los estados más rezagados en la evaluación de sus policías y ostenta uno de los mayores niveles en el uso de armas de fuego, solo superado por el estado de México, el más poblado del país.
A Guerrero le siguen Sinaloa con 23,22 asesinatos por cada 1.000 habitantes y Chihuahua con una tasa de 20,36, mientras que en el extremo opuesto se sitúan Yucatán con cuatro homicidios premeditados y Baja California Sur con diez casos durante los ocho primeros meses de 2014.
Estas cifras advierten de los contrastes que existen en un país que sigue conmocionado por la matanza de Iguala y que se lamenta de la inseguridad ciudadana que reina en algunos de sus estados, donde el crimen organizado se sirve de la impunidad para tratar de imponer su ley.