MADRID 11 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Afganistán han ejecutado este viernes a cuatro personas condenadas por asesinato, después de que las penas fueran ratificadas por los tribunales y de que las familias de las víctimas rechazaran la posibilidad de recibir compensaciones económicas a cambio de conmutar las sentencias.
El Tribunal Supremo afgano ha indicado en su cuenta en la red social X que dos de los condenados han sido ejecutados en la provincia de Baghdis, antes de especificar que el tercero ha sido ajusticiado en un polideportivo en la provincia de Nimroz. El cuarto reo ha sido ejecutado en Fará.
Todas las ejecuciones han sido llevadas a cabo en público y con presencia de familiares de las víctimas, después de que las autoridades instauradas por los talibán tras hacerse con el control del país en agosto de 2021 publicitaran las sentencias e invitaran a la población a acudir a presenciarlas.
Naciones Unidas ha reclamado en varias ocasiones a los talibán que establezcan una moratoria "inmediata" de la pena de muerte, como "paso previo" a su abolición, si bien el grupo ha hecho oídos sordos, en medio del endurecimiento del código legal afgano y el reinicio de los castigos corporales como los latigazos.
En este sentido, el relator especial de la ONU para Afganistán sobre DDHH en Afganistán, Richard Bennett, ha condenado las ejecuciones y pedido al movimiento fundamentalista el cese inmediato de esta práctica.
"Deploro las cuatro ejecuciones públicas llevadas a cabo hoy en las provincias de Badghis, Farah y Nimroz, y reitero que estas ejecuciones, así como los castigos corporales llevados que los talibán han llevado a cabo en público, son claras violaciones del derecho internacional y deben cesar de inmediato", ha hecho saber en su cuenta de la red social X.