MADRID 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La ONU y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) han expresado su preocupación por los efectos de la operación militar israelí sobre el hospital de Al Shifa, el mayor centro médico de la Franja de Gaza, y han reclamado respeto tanto para pacientes como para trabajadores sanitarios y otros civiles atrapados en el interior del complejo.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha señalado en su cuenta de la red social X que las informaciones que dan cuenta de una "incursión militar" sobre el hospital son "profundamente preocupantes". "Hemos perdido de nuevo el contacto con el personal médico del hospital. Estamos extremadamente preocupados por ellos y por la seguridad de sus pacientes", ha afirmado.
Por su parte, el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, se ha confesado "consternado" por las informaciones, recordando que "los hospitales no son campos de batalla". Así, ha señalado que "la protección de los recién nacidos, los pacientes, el personal médico y todos los civiles deben estar por encima de cualquier otra cuestión".
El CICR ha coincidido en esta preocupación, pese a que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han explicado que se trata de una operación "precisa" contra objetivos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). La organización ha pedido en un comunicado que se adopten "todas las medidas" para evitar cualquier posible efecto sobre los civiles, informa el diario 'Times of Israel'.
El Ministerio de Sanidad gazatí, dependiente de Hamás, informó de la muerte de 40 pacientes el lunes, así como de la apertura de una fosa común donde esperaban sepultar 180 cadáveres. También la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció disparos contra uno de sus tres centros en la zona, situado en las inmediaciones del hospital.
El personal y los voluntarios de MSF sobre el terreno son profesionales de la medicina, no expertos militares. Sin embargo, lo que podemos decir es que estamos atentos a estas acusaciones y no hemos recibido ningún informe o indicio de nuestro personal que trabaja en el hospital que apoye las acusaciones de que el hospital está siendo utilizado como base de Hamás.
MSF ha insistido en que las acusaciones israelíes sobre la presencia de túneles bajo el hospital no borran la protección a la que tiene derecho el centro en virtud del Derecho Internacional. Asimismo, considera que aunque la destrucción de dichos túneles fuese legítima, se deben adoptar todas las precauciones necesarias para evitar las afectaciones al propio hospital y a quienes se encuentran dentro.