VALLADOLID 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
La sede de la Organización Manos Unidas en Valladolid destinará en este año 2025 un total de 409.485 euros a nueve proyectos, entre los que se encuentra uno para un Programa de lucha contra el maltrato de las mujeres y la infancia en el oriente de Guatemala y otro para el empoderamiento comunitario de las mujeres y niñas víctimas de explotación sexual en Davao (Filipinas).
Así lo ha presentado este martes en rueda de prensa el vicario general de la Archidiócesis, Jesús Fernández Lubiano, acompañado por el presidente de Manos Unidas Valladolid, José María Borge, y el sacerdote y misionero Jorge López.
En este sentido, esta nueva campaña de Manos Unidas, la número 66, tiene como lema 'Compartir es nuestra mayor riqueza' y comienza este viernes, 7 de febrero, con ayuno voluntario y durante el fin de semana se desarrollará la colecta en las parroquias y templos.
De este modo, el vicario general ha aseverado que esta iniciativa se sitúa en el contexto "más extenso" del año jubilar, que ha convocado el Papa Francisco con motivo de los 2025 años del nacimiento de Jesucristo, a lo que ha añadido que esta es una campaña que se realiza en este mes de febrero, pero que se desarrolla durante todo el año.
En concreto, la sede de Manos Unidas en Valladolid invertirá 32.228 euros en el refuerzo socioeconómico de familias en Chad; 30.481 euros en la lucha contra la malnutrición infantil en Dubbo (Australia) y 61.672 euros en el empoderamiento de mujeres víctimas de explotación sexual en Davao (Filipinas).
Además, en Guatemala, se destinarán 71.970 euros a un programa de prevención del maltrato a mujeres y menores, mientras que en Assam (India) se impulsará la educación para combatir el trabajo infantil con una inversión de 15.938 euros.
Por otro lado, el resto de proyectos incluyen la mejora del acceso a la educación primaria en Ambalanosy (Madagascar), con un presupuesto de 41.926 euros; y la mejora de infraestructuras sanitarias en una escuela de Inharrime (Mozambique), con 60.081 euros.
Asimismo, se destinarán 33.600 euros a la promoción del derecho al agua en Belén (Cisjordania), y 61.579 euros a la segunda fase de un programa para la protección de la primera infancia en el Callao, en Perú.
Por ello, Jesús Fernández Lubiano ha sentenciado que Manos Unidas, en España, es un signo de "esperanza" para estos países que se denominan "en vías de desarrollo" y que trabajan "especialmente" con proyectos humanitarios para el desarrollo de estos territorios.
Por su parte, el presidente de Manos Unidas Valladolid ha criticado que, en la actualidad, se le da "prioridad" a la acumulación de riquezas sobre la inclusión de las personas en la protección del medio ambiente. "Desde la organización queremos trasladar que la verdadera prosperidad se encuentra en vivir de una manera digna junto a los demás, reconociendo la interdependencia y el cuidado de nuestra casa común y las personas que habitamos en ella", ha destacado.
De igual manera, José María Borge ha manifestado que prácticamente el 85 por ciento del dinero que reciben se destina a la financiación de proyectos, lo cual ha aseverado que se realiza "sin ningún intermediario"; el resto del capital ha explicado que se destina a los gastos de estructura.
En lo que se refiere a los datos económicos de la delegación de Valladolid en el año pasado, esta recaudó un total de 963.421 euros, de los que el 91,75 por ciento, es decir, 863.980 euros, proceden del sector privado y el 8,25 por ciento del sector público.
"Con esta recaudación que hemos tenido se han cubierto los proyectos más que suficiente", ha sentenciado el presidente, por lo que ha asegurado que "el resto de la recaudación que no es necesaria en Valladolid, se va a disposición de las agencias centrales de Madrid para cubrir otras necesidades".
Para concluir, el sacerdote ha explicado que ha estado once años destinado en Zambia como misionero, y allí descubrió que en esa zona necesitaba una escuela para cuidar a los menores mientras que sus padres salían a trabajar al campo; por ello crearon una guardería que, con los años, se ha ido extendiendo y, actualmente, hay 600 niños aprendiendo allí con unas edades comprendidas entre los tres y 18 años.
"Manos Unidas puede cambiar la vida de mucha gente, de una comunidad y de un entorno", ha concluido Jorge López.